Accesorios
El agua tiene una virtud maravillosa, que es disolver y mezclar una enorme cantidad de elementos y sustancias, pero esta capacidad en las piscinas genera la obligación de vigilarla muy de cerca para que lo que se produce en ella no sea perjudicial para las personas ni para las propias instalaciones. A continuación, encontrarás algunos pasos importantes para incluir en la rutina de mantenimiento semanal de tu piscina.
Recoger las partículas de la superficie
Hojas, insectos, etc. Este tipo de desperdicios contaminan el agua. Intenta quitar las partículas antes de que se precipiten al fondo de la piscina, donde se hace más difícil quitarlas, y pueden producir manchas.
Cepillado de paredes
En las paredes de la piscina, pueden acumularse algas y pequeños residuos. Cepilla las paredes y los laterales de la piscina todas las semanas para quitar la suciedad y evitar que se extiendan las algas.
Utiliza la aspiradora
Una vez que las algas y el sedimento se retiraron de las paredes con un cepillo, pueden aspirarse, junto con otra suciedad que se haya acumulado en el fondo de la piscina.
Aspiradora manual:
– Sumerge el cabezal y la manguera de la aspiradora antes de conectar la aspiradora a la toma de vacuum.
– Conecta la aspiradora a la toma y verifica para asegurarte de que la manguera no flote.
– Aspira el fondo de la piscina moviendo la espiradora lentamente para asegurarte de atrapar toda la suciedad posible.
Aspiradora automática:
Por succión:
– Sumerge el cabezal y la manguera de la aspiradora antes de conectar la aspiradora a la toma de vacuum.
– Conecta la aspiradora a la toma y verifica para asegurarte de que la manguera no flote.
- Al encender la bomba el carrito se moverá solo por toda el área de la piscina.
Eléctricas:
- Conecte la fuente a la toma de corriente.
- Introduzca el carrito al agua.
- Encienda la fuente y automáticamente el carrito se moverá solo por toda el área de la piscina.